Estas dietas constituyen un verdadero tratamiento médico, que se establece en una serie de fases, que tiene 2 objetivos (igualmente importantes):
1. Pérdida de peso, que se logra de forma rápida y sin pasar hambre
2. Reeducación alimentaria, para impedir la recuperación del peso perdido
¿Cómo funciona?
La base de este tratamiento es meter a nuestro cuerpo en un estado que se denomina cetosis, durante un tiempo limitado, que es el verdadero responsable de la pérdida rápida de peso, a expensas de la grasa acumulada, preservando la masa muscular, y disminuyendo al máximo las posibilidades del efecto yo-yó o efecto rebote que se observa en otras dietas.
Para ello, se van a sustituir algunas o todas las comidas por unos preparados alimenticios que contienen por un lado, todos los nutrientes necesarios para una correcta alimentación y, por otro lado, un suplemento de proteínas de alto valor biológico que son las que ayudan a inducir ese estado de cetosis. Todo este tratamiento va, además, suplementado con un conjunto de micronutrientes (como los iones, vitaminas, ácidos omega 3 y 6, etc) que son imprescindibles para que todo el tratamiento sea un éxito.
Otra de las claves del éxito es la mentalización de la paciente y el cumplimiento estricto por parte del paciente de las distintas fases del tratamiento, sobre todo durante las fases de cetosis. Hay que saber que la más mínima transgresión supondría finalizar dicha cetosis, y por tanto, tener que volver a comenzar todo el tratamiento de nuevo, con la consiguiente pérdida de peso y dinero
¿Qué es exactamente la cetosis?
Nuestras células (sobre todo las del cerebro y las del riñón) usan fundamentalmente glucosa como combustible. Cuando hacemos una dieta baja en calorías, nuestro cuerpo gasta primero sus reservas de glucosa y sólo después comienza a quemar la grasa. Las reservas de glucosa están localizadas en el hígado y en el músculo.
El tejido graso de nuestro organismo, al “quemarse” en nuestro hígado (que es la gran fábrica del cuerpo), origina unas sustancias denominadas cuerpos cetónicos, que son capaces de ser usadas por nuestras células como combustible y fuente de energía. Cuando las células usan exclusivamente estos cuerpos cetónicos como fuente de energía, estamos en un estado de cetosis.
Las dietas de aporte proteico son dietas hipocalóricas en las que se da un aporte extra de proteínas, para conseguir que nuestro organismo entre en cetosis rápidamente y se pierda peso a expensas de quemar grasa y no a expensas de nuestros músculos.
¿Qué ventajas tiene la cetosis? ¿Tiene riesgos?
1. Se produce una pérdida de peso rápida y a expensas de la grasa acumulada, no del músculo. Esto es muy importante, porque es una de las principales razones que evita el temido efecto yo-yó
2. Evitan la sensación de hambre, por acción directa de los cuerpos cetónicos a nivel cerebral
3. Tienen un cierto efecto “euforizante” que ayuda al paciente a sentirse bien, y a disminuir los cambios de humor que aparecen en muchas dietas
4. Cuando se produce bajo estricto control médico y analítico, la cetosis no entraña ningún tipo de riesgo.
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